“La que puede, puede… La que no; que se opere…”. No te frustras cada vez que entras a una barra y vez a estos únicos nenes con cuerpo de revista (nota y aparte, beben como locos y comen frituras) y tu matándote con dieta y haciendo ejercicios. Tal es el grado que corres 5 días a la semana y no vez ni siquiera el aguaje de tu cuerpo en tratar de verse decente.
Creo que esto solo me pasa a mí, llevo algún tiempo “tratando” de verme lo suficiente cómodo como para quitarme la camisa en la playa y competir por atención. Pero aun hoy, ese no es el caso, sigo con mi biscuit (por qué de muffin bajo al menos a biscuit), mas allá aun de mis traumas con mi cuerpo hace poco un desgraciado me dio su veredicto sobre mi nariz. “Para que el cuerpo sea el cuerpo te tienes que operar la nariz…”, eso me dijo el muy atrevido. Así que para gustar no tan solo debo fatigarme 5 días a la semana sino que debo operarme, a eso ha llegado mi realidad.
¿Por qué el muffin, el cuerpo, la nariz, la operación? Simple, nos estamos convirtiendo en un grupo muy exigente de satisfacer. No tan solo queremos un hombre (o mujer) que cumpla ciertos requisitos básicos pero más allá de eso lo llevamos al extremo de que si no es de revista es un rotundo NO. Si no se parece a fulano de tal o mengano o perencejo no estamos contentos. Tiene que tener six pack, pecho, brazos, piernas, muslos incluso cara trabajada y esto es solo para dirigirles la palabra porque más allá de eso lo queremos con chavos, estudios, trabajo, casa propia y auto propio. Incluso las amistades tienen que cumplir estos requisitos.
A mí me ha pasado que he ido a varios lugares y noto que todos se parecen entre sí, tratan de emular el ideal de cómo se deberían ver, como se deben comportar, con quien deben socializar. Y para mí es un poco agotador cumplir eso y si debo cumplirlos para pertenecer y agrandar mis amistades en Facebook, rotundamente me niego a pertenecer.
No puedo negar que hay personas que se roban la atención por sus apariencias pero eso no lo puede ser todo. Me niego a creerlo. Tengo el síndrome de patito feo debo aceptarlo, pero por que debo de pertenecer a algo que no quiero. Cada cual hace con su cuerpo lo que quiere pero como tal tú has lo que quieras pero no me vengas a forzar tus opiniones en torno a eso a mí ni a nadie. No creo que sea saludable estar vendiendo ideales por que muy pocas veces se cumplen por mas musculoso que te veas, por más operaciones que te hayas hechos de alguna manera siempre le fallaras a la gente. Cuando solo deberías de estar cumpliendo tus propios requisitos y evaluando que es realmente importante en tu vida y que realmente es importante en amistades, pareja y para ti. Más allá de ideal creo que deberíamos de reforzar las palabras realmente importante. Siempre he pensado que la belleza está en la imperfección y todos los bien cercanos a mí son imperfectos porque esa cualidad los hace humanos y eso es lo que busco, humanos.
Mis palabras a esto pues cásate con fulano de tal, mengano o perencejo. Yo no puedo cumplir esos estándares físicos que se exigen en este ambiente (algunos no quiero generalizar). Por tal razón sé que nunca me van a decir “EL CUERPO ES EL CUERPO”. Más allá de porque no quiero cumplirlos y no creo que deba es porque biológicamente yo nunca voy a tener cuerpo de striper, nunca me pienso operar nada y nunca cumpliré estándares de nadie porque siempre le voy a fallar a alguien, así que mejor le fallo a todo el mundo (en ese aspecto) y nadie puede esperarse nada. Mejor aun, sorprendo, como a mi amiguito que me dijo que me operara la nariz, yo solo le dije: “Gracias a Dios que yo me puedo operar la nariz pero que lastima que los celebros no se operan, para que al menos tuvieses una idea”.
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