HASTA LOS PSICÓLOGOS ESTÁN EN CONTRA DE LA COMAY

LA ASOCIACIÓN DE PSICOLOGÍA DE PUERTO RICO (APPR) expresó su indignación ante las expresiones en el programa SuperXclusivo. El sentir de la APPR fue esbozado el pasado 8 de diciembre.

La Asociación de Psicología de Puerto Rico (APPR) hace eco de las muestras de indignación de la ciudadanía ante las expresiones en el Programa Súper Exclusivo trasmitido por WAPA Televisión en torno al caso del publicista que recientemente fue víctima de la ola criminal. En especial nos unimos a la iniciativa del Colegio de Profesionales del Trabajo Social de Puerto Rico por respaldar este movimiento y aplaudimos la reacción de múltiples corporaciones que han retirado su auspicio al programa.

La Junta Directiva de la APPR consistentemente ha señalado el papel de los medios de comunicación en contribuir a la salud mental del pueblo puertorriqueño. Los medios generan opinión pública y lamentablemente, en múltiples ocasiones, en lugar de presentar de manera responsable acontecimientos de interés colectivo, propician la desinformación generando discursos estigmatizantes sobre las personas involucradas. Esto es particularmente cierto si estas personas pertenecen a sectores socialmente vulnerabilizados.

En el caso de programas para el supuesto entretenimiento familiar debe haber aún más conciencia sobre el potencial negativo que tienen los comentarios sobre personas que viven momentos difíciles. Partimos del principio ético de que no se debe capitalizar en el sufrimiento humano. Indica la Dra. Sheila Rodríguez Madera, Presidenta Electa: “Todas las personas tenemos el deber social de examinar cómo formamos parte del problema de violencia que nos afecta como pueblo y, cómo podemos ser parte de la solución”.

Exigimos un trato digno para las personas aludidas en el programa televisivo mencionado, sin importar su género, orientación sexual, nacionalidad, o clase social. La APPR reitera que no podemos seguir nutriendo el clima de violencia e intolerancia. Esa es nuestra responsabilidad ciudadana y profesional. Exhortamos a que esta situación se asuma como una experiencia de aprendizaje y crecimiento como pueblo, que unido puede hacer la diferencia. La indignación del pueblo ante la injusticia es un acto de esperanza.